Es la soledad
el camino sin nadie
viento y arena.
Falsa sonrisa
se va sin dejar trazas
de tu alegría.
Como yo, nadie
sólo yo soy el mismo
perfecto idiota.
Imposible ser
todo lo que hoy veo
dentro de tu alma.
Insiste en vivir
la noche de otoño
que siento morir.
Siempre que espero
tarda en salir la luna
muerta de frío.
Cuando falta el sol
y se ausenta la lluvia
siempre quedas tú.
Trae tus manos,
socorre a mi corazón.
Me duele el amor
Marco Antonio.
Qué bien, Marco.
ResponderEliminarTodos me gustan, en conjunto.
El primero es entrar por la puerta grande.
¿Qué diría Cormac Mcarthy si lo leyera?
Sigue pulsando esta tecla.
¡Qué perguapos! son como una cría de gorrión: pequeñinos,cálidos, revolviendo el nial y pidiendo que yos den de comer.
ResponderEliminarEn "Trae tus manos..." Nun pueo date lo que pides, sólo tengo ales, pero cuenta con elles siempre que necesites aliviate esi corazón tan fráxil.
Y tienes tola razón con la luna, nunca ta llena cuando la necesites y, a veces, faise la nueva.
Estos haykus son como les gotes de rocío, quédense pegaos a les plumes y laven el alma.
Mª Luz diz que sigas pulsando esa tecla, toy de acuerdo.
Hay dolor ausencia, en tus escritos, y quien como yo tengo el corazon en brasa viva...
ResponderEliminarYa llego el invierno, o casi
esta anocheciendo, o casi
Pero manana, amanecera, al vez...